Una jueza federal concedió este viernes una suspensión de oficio y de plano a Óscar Omar Treviño Morales, conocido como «Z-42», para frenar su extradición a Estados Unidos.
Suspensión otorgada por jueza María del Carmen Sánchez Cisneros
María del Carmen Sánchez Cisneros, titular del Juzgado Cuarto de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México, resolvió a favor de Treviño Morales en el juicio de amparo 635/2024. La jueza consideró que la extradición estaba fuera de procedimiento judicial, según informó el diario El Universal.
El «Z-42» tramitó este amparo a finales de junio, y el 4 de julio la jueza Sánchez Cisneros concedió la suspensión, al considerar inminente la extradición y salida del país del exlíder del cártel de «Los Zetas».
Detención y cargos contra «Z-42»
Treviño Morales fue arrestado en noviembre de 2015 en San Pedro Garza García, Nuevo León, y desde entonces permanece recluido en el Centro Federal de Readaptación Social 12 CPS-Guanajuato, ubicado en el municipio de Ocampo.
Según la Administración de Control de Drogas (DEA), Treviño Morales facilitó y supervisó grandes envíos de drogas a Estados Unidos y otros lugares, enfrentando múltiples acusaciones en distritos judiciales estadounidenses.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) aprobó su extradición en 2023, respondiendo a la solicitud de la Corte de Distrito de Columbia por delitos de tráfico de drogas. Desde entonces, «Z-42» ha buscado amparos para evitar ser enviado a Estados Unidos.
Intentos previos de amparo
En agosto de 2023, un juez federal negó la suspensión definitiva a Treviño Morales en un juicio de amparo contra la orden de extradición. El juez Juan Manuel Brieba Castro, del Juzgado Sexto de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México, rechazó otorgar la protección a Treviño Morales, una resolución confirmada por el Consejo de la Judicatura Federal (CJF).
Histórico de violencia y acusaciones
Treviño Morales, originario de Nuevo Laredo, Tamaulipas, fue uno de los líderes más notorios de «Los Zetas», un cártel conocido por su violencia. Su captura en marzo de 2015 fue considerada un golpe significativo para la organización.
Entre las acusaciones más graves contra Treviño Morales se encuentran secuestro, homicidio y tráfico de cocaína hacia Estados Unidos. Por estos crímenes, el Departamento de Estado de EEUU ofreció una recompensa de hasta cinco millones de dólares por información que llevara a su captura.
También se le atribuyen la masacre de migrantes en San Fernando, Tamaulipas, y el incendio del Casino Royale en Monterrey, Nuevo León.
En 2019, un juez federal en México lo condenó a 18 años de prisión. A pesar de su condena, las autoridades estadounidenses siguen buscando su extradición.
