Sordo Madaleno Arquitectos construyó la Casa Club de Valle San Nicolás a lo largo del lago Avándaro. Se trata de un edificio redondo hecho a base de madera contralaminada y piedra volcánica.
Está ubicado en un desarrollo residencial de 385 hectáreas, junto a una pista de esquí acuático y alberga una variedad de espacios para socializar. Fue diseñada sobre una superficie de aproximadamente mil 800 metros cuadrados (m2), diseñada para facilitar el acceso al paisaje circundante.
El estudio de Sordo Madaleno explicó: “Se exploraron las condiciones naturales del Valle San Nicolás para comprender mejor cómo los dos elementos naturales más destacados (las montañas y el lago) podrían converger y relacionarse a través de una obra de arquitectura”.
El lugar también cuenta con una ampliación en forma de muelle que cuenta con un solárium y un carril de natación. Los acabados incluyen piedra volcánica, roble rojo americano y tarimas de madera sostenible.