En un giro que ni el mejor guionista de Hollywood podría haber imaginado, los valientes paracaidistas británicos, recreando el heroico lanzamiento aéreo del Día ‘D’, se encontraron con una inesperada trinchera moderna: ¡los controles de aduana franceses! Sí, así como lo leen. En pleno 80.º aniversario de la histórica invasión que simboliza la liberación de Europa de los nazis, los intrépidos soldados tuvieron que enfrentarse no a las defensas alemanas, sino a los minuciosos funcionarios de la aduana francesa.
Este jueves, los cerca de 320 paracaidistas británicos que participaron en la conmemoración del Día ‘D’ en Normandía, no sólo tuvieron que ejecutar un perfecto aterrizaje, sino también recoger sus paracaídas y, acto seguido, formar una fila tan ordenada como en sus días de instrucción militar. ¿El motivo? Entregar sus pasaportes para la inspección de los diligentes agentes aduaneros franceses, que habían montado un improvisado puesto de control fronterizo en medio del pintoresco campo normando.
Lo cierto es que desde que Reino Unido decidió dar un paso al costado y abandonar la Unión Europea con el «Brexit» en 2020, la libre circulación por los países del bloque se volvió una página del pasado para los británicos. Ahora, los controles migratorios son la nueva realidad, incluso en eventos que buscan recordar y honrar la unidad y colaboración y hermandad internacional.
Imaginen la escena: héroes modernos recreando una de las operaciones más audaces de la Segunda Guerra Mundial, sólo para ser recibidos con un «Bonjour, sus pasaportes, por favor». Es la ironía del destino en su máxima expresión. Y si pensaban que lo único que iba a volar eran los paracaídas, se equivocaron. Volaron también los documentos y los procedimientos burocráticos.
Al final del día, los paracaidistas británicos cumplieron con su misión de homenaje, aunque con un inesperado capítulo adicional. Quizás, en un futuro, los libros de historia incluyan este episodio como una anécdota curiosa del «Brexit» y su impacto en eventos internacionales.
