Por los festejos navideños y de fin de año, la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) en el Estado de México estima una derrama económica de 18,000 millones de pesos. Su presidente, Mauricio Massud Martínez, detalló que el ingreso anual del sector restaurantero oscila en 60,000 millones de pesos, por lo que en esta temporada representa 30% del total de sus ventas.
Los días de mayor venta, destacó, se dan previo al 24 de diciembre cuando la población en general acostumbra celebrar y salir a los establecimientos, donde se registran aforos de 100%.
“Muchas personas acostumbran salir a celebrar en familia, con amigos o compañeros de trabajo. Generalmente son reuniones de 10 a 15 personas. Tendremos un cierre importante en navidad, pero sobre todo con las cenas de fin de año y la gente que no tenga espacio en casa para reunirse y celebrar la llegada del 2023”.
Las ventas más fuertes, añadió, se dan el 31 de diciembre por la cenas de fin de año, ya que el 24 se fusionan los desayunos y las comidas porque las celebraciones son más familiares, incluso el 25 muchos negocios ya no laboran porque dan el día a su personal.
“Prácticamente son dos semanas y media las más fuertes, la venta arranca el 12 de diciembre con las celebraciones de la virgen de Guadalupe y terminan el 24 de diciembre, son las semanas con mayor afluencia”.
Sostuvo que pese a la situación económica actual, que se ha complicado por la inflación, los restauranteros están haciendo un esfuerzo para mantener los precios, calidad en el servicio y en los platillos. “Lo hemos hecho así para que la gente tenga la oportunidad de salir a festejar, estamos recibiendo reservaciones de fin de año”.
Aunque en otros años en estas fechas era común la contratación de personal eventual, precisó que en esta ocasión tuvieron que adaptarse con la plantilla laboral que mantienen para evitar gastos extraordinarios.
Finalmente, Massud Martínez recordó que los restaurantes preparan paquetes especiales que incluyen entrada, platillo fuerte, postre, uvas y vino para el tradicional brindis.
De las 700,000 unidades económicas que hay en la entidad, al menos 95% son micro y pequeñas empresas, y del total 62,000 unidades económicas están dedicadas a la venta de alimentos.
Pese a todo, el sector sigue 30% abajo en el número de comensales en comparación con 2019, y aunque ya igualó las ventas de ese año, hoy tiene una inflación de 25% que les está complicando la existencia.