Una veintena de exgobernadores priistas ha solicitado al presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno Cárdenas, que posponga la 24 Asamblea Nacional prevista para el próximo domingo 7 de julio. Asimismo, demandan que la actual dirigencia concluya su mandato, se designe a un Comité Ejecutivo Nacional interino que convoque a nuevas elecciones y se promuevan cambios en los Documentos Básicos del partido para reforzar el principio de «no reelección de la dirigencia».
En un pronunciamiento firmado por estos exmandatarios estatales, encabezados por la yucateca Dulce María Sauri Riancho, se subraya la necesidad de una «indispensable separación de la actual dirigencia», dada la gravedad de la crisis que atraviesa el partido y las cruciales redefiniciones necesarias para mantener su viabilidad como opción política.
El documento señala que la actual dirigencia convocó «apresuradamente» a la Asamblea Nacional, sin haber concluido el proceso electoral vigente, contraviniendo la normatividad interna del PRI.
Acusaciones y demandas de los exgobernadores
Los exgobernadores, entre quienes se encuentran también expresidentes del partido, acusan que el objetivo de convocar a la Asamblea Nacional es «manipular y operar nuevamente una reforma estatutaria» para permitir la reelección del presidente actual del CEN y concentrar más atribuciones, como la de designar directamente a los coordinadores de las fracciones parlamentarias en las legislaturas federales y estatales.
Los firmantes demandan que los nuevos Documentos Básicos refuercen el principio de «no reelección de la dirigencia», asegurando que «bajo ninguna modalidad o subterfugio de cambio estatutario» se extiendan indebidamente los mandatos de una dirigencia, evitando que el partido quede en manos de un grupo particular.
El PRI: Una llamada urgente a la renovación
El PRI, un partido casi centenario que ha contribuido significativamente a la creación de instituciones y al progreso de México, se encuentra ahora seriamente debilitado. Los exgobernadores enfatizan la necesidad de repensar, recomponer o refundar el partido para poder resurgir y materializar, en los nuevos escenarios nacionales, los principios de «Democracia y Justicia Social» que le dieron origen.
Entre los exgobernadores que suscriben el pronunciamiento se encuentran Dulce María Sauri (Yucatán), Pedro Joaquín Coldwell (Quintana Roo), José Reyes Baéza y Fernando Baéza (Chihuahua), Natividad González, Benjamín González Clariond y Sócrates Rizo (Nuevo León), Guillermo Mercado (Baja California Sur), Miguel Ángel Núñez Soto (Hidalgo), Francisco Labastida Ochoa (Sinaloa), Armando López Nogales (Sonora), Rigoberto Ochoa Zaragoza (Nayarit), Arturo Montiel Rojas (Estado de México), Miguel Borge Martín (Quintana Roo), Enrique Martínez (Coahuila), José Antonio González Curi (Campeche) y Víctor Manuel Tinoco Rubí (Michoacán).
Apoyo de exlegisladores y exfuncionarios
El documento también cuenta con la firma de 250 priistas adicionales, incluidos exlegisladores y exfuncionarios públicos como el exsenador Francisco Arroyo Vieyra, el exsecretario de Turismo Enrique de la Madrid, el exvocero presidencial Fernando Lerdo de Tejada y el exdiputado federal José Ramón Martell.
El expresidente del PRI, Manlio Fabio Beltrones, ha declarado que no respaldará el «despropósito» y la «pésima idea» de Alejandro Moreno Cárdenas de reelegirse al frente del partido. En redes sociales, Beltrones, exgobernador de Sonora y actual senador electo, afirmó que la permanencia del dirigente priista no soluciona el problema de fondo que enfrenta el PRI, sino que es una decisión «irresponsable y absurda», calificándola incluso como una «mala broma».
«Definitivamente es una pésima idea, que hasta parece una mala broma, abordar una situación tan crítica para el PRI con una medida que violenta su historia de casi 100 años basada en un movimiento reeleccionista», recalcó Beltrones.