En la pequeña comunidad de Santa Catarina, ubicada en el municipio de Copainalá, Chiapas, la escuela primaria Fray Víctor María Flores vivió un evento insólito y entrañable: la ceremonia de graduación de una sola alumna de sexto año.
Una ceremonia singular y emotiva
A pesar de que solo una estudiante completó el ciclo escolar, la escuela no escatimó en la organización de una ceremonia completa y emotiva. La directora del plantel, Florelinda Ramírez Reyes, se aseguró de que la ocasión fuera especial, demostrando un profundo compromiso con la educación y la comunidad. La celebración incluyó todos los elementos tradicionales de una graduación: un baile en la explanada, la entrega formal de documentos y una coreografía especial.
La graduada y su día especial
La protagonista de esta singular graduación, vestida con un elegante atuendo azul y sosteniendo un ramo de flores, disfrutó de su día acompañada por familiares, compañeros y maestros. El evento, que fue cuidadosamente preparado, quedó inmortalizado en un video grabado por los asistentes, capturando la emoción y la alegría del momento.
Reacciones en redes sociales
La ceremonia no sólo conmovió a los presentes, sino que también generó una gran repercusión en redes sociales. La publicación del evento en plataformas digitales recibió una oleada de felicitaciones y reconocimiento tanto para la alumna como para la directora Ramírez Reyes. Los comentarios destacaron la dedicación y el esfuerzo por mantener viva la tradición escolar, a pesar de las circunstancias inusuales.
Compromiso con la educación en comunidades pequeñas
Este evento subraya la importancia del compromiso educativo en comunidades pequeñas y remotas. La escuela Fray Víctor María Flores, que atiende a una población de 345 habitantes, se convirtió en un ejemplo de cómo la dedicación y el cariño pueden transformar cualquier circunstancia en una experiencia memorable y significativa para los estudiantes.
