Los rebeldes hutíes de Yemen responsabilizaron a Israel por una serie de bombardeos en Hodeida, una ciudad portuaria bajo su control, realizados este sábado. Estos ataques ocurrieron un día después de que los hutíes reivindicaran un atentado en Tel Aviv.
Hodeida bajo ataque
La cadena Al Masirah, gestionada por los hutíes, reportó una «serie de ataques» contra «instalaciones de almacenamiento de combustible» en el puerto, señalando que hubo muertos y heridos. Las Fuerzas de Defensa de Israel confirmaron la ofensiva.
Mohamed al Bukhaiti, integrante del politburó hutí, expresó en redes sociales: «La entidad sionista pagará por atacar instalaciones civiles, y responderemos a la escalada con escalada».
Repercusiones del ataque en Tel Aviv
El ataque con drones de los hutíes, que logró burlar la defensa aérea israelí, causó la muerte de un civil en un edificio residencial de Tel Aviv. Este incidente llevó a Israel a emitir amenazas de represalias, incrementando las tensiones en la región.
Alianzas y conflicto
Los hutíes, apoyados por Irán y aliados del movimiento islamista palestino Hamás, que ha estado en conflicto con Israel en Gaza desde el 7 de octubre, afirmaron que «los ataques del enemigo israelí contra instalaciones de almacenamiento de petróleo en el puerto de Hodeida» resultaron en muertos y heridos, sin proporcionar cifras exactas.
Escalada de violencia
El conflicto entre los hutíes y las fuerzas israelíes es una manifestación más de la escalada de violencia en el Oriente Medio, donde los intereses de diversas naciones y grupos armados convergen y se enfrentan continuamente. Los ataques en Hodeida y Tel Aviv son solo una muestra del complejo entramado de alianzas y enemistades que caracterizan la región.