El Gobierno japonés alzó la voz ante la Casa Blanca tras los comentarios de Joe Biden, desatando una controversia internacional. En un evento político, el presidente estadounidense comparó a Japón con otras potencias, desatando la ira diplomática nipona.
Según la agencia Jiji, la embajada japonesa en Washington expresó su decepción por las palabras de Biden, asegurando que no reflejan la realidad de Japón. Esta acción se suma a un reciente gesto de diplomacia entre ambas naciones, cuando Biden ofreció una cena de Estado al primer ministro japonés, Fumio Kishida.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de EE. UU., John Kirby, intentó mitigar la controversia, explicando que Biden buscaba destacar la importancia de la inmigración en Estados Unidos, sin embargo, la reacción de las naciones implicadas no se hizo esperar.
India y Rusia también respondieron a las afirmaciones de Biden. El ministro de Asuntos Exteriores indio, Subrahmanyam Jaishankar, defendió a su país como una sociedad abierta y pluralista, mientras que el vocero presidencial ruso, Dmitri Peskov, desestimó las palabras del presidente estadounidense, señalando restricciones impuestas por otras naciones.
Como ocurriera recientemente en el cruce de palabras desafortunadas entre España y Argentina, estos acontecimientos evidencian la delicada relación diplomática entre potencias mundiales, donde las palabras pueden desencadenar consecuencias significativas en el ámbito internacional.