Matrimonio igualitario en el Edomex

Las parejas también deben lidiar con otros trámites para seguros médicos y vivienda.

Al grupo que encabezaba Ernesto Montes de Oca y Leonardo Espinoza, les habían dicho que no se movieran del portón principal del Congreso mexiquense. Que los diputados llevaban dos días indecisos, pero que sería histórico al momento del desahogo. Les habían dicho que era la última oportunidad. Que estaban a punto de aprobar la Ley de Matrimonios Igualitarios que había iniciado con el activista Israfíl Filos Real.

Era el martes 11 de octubre de 2022 y a las afueras del recinto hubo una fiesta con el color de la bandera LGBTQ+.

El Estado de México había una solicitud de más de 15 años hacia el Congreso local para la aprobación de la Ley de Matrimonios Igualitarios.

La reforma establece adiciones al Código Civil, en particular al Libro Cuarto del Derecho Familiar Titulo Primero de la Familia y el Matrimonio, en particular de los requisitos para contraer matrimonio y del Título Décimo Tercero del Concubinato, así como la definición del concubinato y los Derechos y obligaciones que nacen del concubinato.

En términos de ley, con el Decreto se reformaron los artículos 4.1 Bis, 4.4, fracción IX del artículo 4.7, 4.72, 4.403 y 4.404 del Código Civil del Estado de México. Y el siguiente paso es hacer valer dichos derechos.

Al Registro Civil ahora se puede llegar solas, sin testigos o un amparo, explican Sandra y Yesenia. Ellas se presentaron solas y con su hijo en brazos unos 15 minutos antes del horario que les solicitó el juez.

Llegaron al Registro Civil de Toluca un jueves a las 14:45 horas porque se casaban esa tarde del 19 de enero de 2023. Fue una recepción fortuita. Por mucho 20 minutos. Es lo que demoró el juez para otorgarles legalmente su acta de matrimonio.

“Fue muy rápido y el juez muy amable”, explica Sandra Bermúdez González y pareciera que lo dice como lo más cotidiano que pudo pasar, pero ella y Yesenia saben que para celebrar un matrimonio entre 2 mujeres en el Estado de México las parejas debieron esperar más de 15 años.

Sandra y Yesenia se conocieron hace 8 años, pero hace cinco se hicieron pareja. Luego decidieron ser mamás y se sometieron a un proceso médico en el que a ambas les extrajeron óvulos para poder lograrlo.

“Las dos somos su mamá, las dos tenemos la misma responsabilidad y cuando debemos ir a la escuela va una y a veces otra”, explicaron.

Aún así, han lidiado con la discriminación y con el rechazo. También con los trámites burocráticos que no les permitían acceder a todos los derechos que son obligados para el resto.

Fue entonces que hallaron más trabas para vivir en pareja y atender a su pequeño. Las leyes no respaldaban del todo la atención médica y otros trámites legales.

Redacción
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