Estados Unidos.– Sofi Maure, una joven tuitera, compartió con fotos la mejor noticia. Se casa con ella misma porque el amor propio es lo más importante; ¿o no?
Si bien la boda tuvo vestido de novia y hasta pastel, la felicidad por estar casada consigo misma no duró mucho.
Ahora, contrario a todo pronóstico, Sofi Maure está harta y ya se quiere divorciar.
Compra vestido de novia y pastel para casarse con ella misma
Sofi Maure, usuaria de Twitter, compartió las fotografías de su inusual boda.
Aunque hubo vestido de novia y hasta pastel, resulta que el matrimonio era con ella misma.
Sí. Sofi Maure se casó consigo misma en un “momento esquizo” esperando solo lo mejor.
Y es que, ante tremenda muestra de amor propio, ¿qué podría salir mal?
La boda de Sofi Maure se celebró el 19 de febrero, día en el que publicó las fotos vestida de novia.
“Hoy en momentos esquizo de mi vida, me compré un vestido de novia y me cociné una torta de casamiento para casarme conmigo misma” relató Sofi Maure.
Entre comentarios, usuarios de Twitter dudaron que casarse con ella misma fuera una realidad.
Ante esto, la joven mostró el pastel de bodas que se preparó.
Si casarse consigo misma ya era una situación poco común, lo que vino un día después rompió todos los límites.
Pues contrario a lo que podría pensarse -o lo que ella esperó- la felicidad le duró poco y ahora es tiempo de tomar duras decisiones.
Casarse con ella misma no funcionó; está harta y quiere el divorcio
Una joven tuitera, Sofi Maure, se casó con ella misma en una prueba extrema de amor propio.
No obstante, la historia feliz duró menos de lo que pensó y ahora piensa hasta en el divorcio.
Un día después de compartir las fotografías vestida de novia, Sofi Maure actualizó el estado de su matrimonio y las noticias no fueron buenas:
“Actualización: Voy un día casada conmigo y no me aguanto más, estoy viendo cómo es el tema del divorcio por las dudas”, posteó Sofi Maure.
No sabemos qué pudo pasar con Sofi Maure para estar harta de sí misma. Pero, en comentarios dividió opiniones.
Mientras algunos están incrédulos a su historia, otros hasta la reconocen por romper el récord.
Pues nadie en el mundo había durado -¿o soportado?- tan poco, casado consigo mismo.